(Rosario de Argentina) Poemas

Ante todo tengo la imperiosa necesidad de dedicar unas letras a estos poemas que desde hace años vienen sacudiendo mi interés y complacencia, me parecen hechos con una hermosura única y narrado con todo el dolor que puede traer un corazón feliz y acongojado a la vez, dulzura y amargura, comprensión y ardor, en conclusión... desprendimiento, con Uds. Rosario.

Diálogo de Dolor.

Si sos libre para amarme
Yo seré la preferida
Y aunque seas compartido
Y me duelan mil heridas
Acaricio tus palabras
Las acuño como a un niño
Dilo mi amor, que se escuche
Grita fuerte hacia el viento:
"Si pudiera amar de nuevo,
Si yo tuviera esperanzas,
Si no fuera mi alma seca
Tu estarías a mi lado.
Serías la que yo amo,
No tengas dudas de ello.
Por favor, sé mi amiga
Mantén tu dolor callado
No remarques mis errores
No lo hagas por favor
Comprende que necesito
Calor humano, caricias
Tener mi ilusión pequeña
Escapar de mi desierto
Soñar montañas y selvas
Sentir que soy muy amado
Que no soy un solitario
Comprende, vida comprende
Todo este dolor que siento
No ruegues por un futuro
Si yo no tengo presente
No hay pasado que nos una
Solo es ahora, mi amor
Sonríe si te lo pido
Ten sosiego, dame paz
Que serás la preferida
No tengas dudas de ello
Que serás quien yo más ame
Si tengo mi corazón".
Acaricio estas palabras,
Las acuño como a un niño
Y el regalo de tu música
Aún resuena en mi oído.
Es mi alma de mujer
La que no entiende, mi vida
Tu naturaleza de hombre
Y toda esta lejanía
Mis caricias no te llegan
Y yo no siento las tuyas
Comprende también, comprende
Mis gritos, mis llantos, mi angustia
Sólo te tengo un minuto
Y estoy la vida sin verte
No te pido nada amor,
Sólo ámame en silencio
Sólo dilo cuando puedas
Ser entero, estar parado
Mirando de frente al cielo
Mirando mis ojos muy negros
Hay espera y desespero
Te extraño tanto que duele
Quiero tenerte a mi lado
Quiero abrazarte fuerte
Quiero sonreír contigo
Ser feliz darte fuerzas
Estar en tus pensamientos
Ser tu mujer y tu amiga
Quien te ame y te consuele
Sabré esperar si lo dices
Sabré creer si lo quieres
Aunque muera despacito
En silencio con cada lagrima
Por saberte compartido.


El Regalo de los Dioses.

Si es para mi tu risa
Vuelve la vida a mi cuerpo
No hay llantos
Ni hay distancias
Que puedan sacarme eso.
Quisiera quedar callada.
Quisiera poder hacerlo
Mirando cuando te ríes
Flotando cerca del cielo
Cerca de tus dioses antígüos
Que bendijeron la risa
Y la dieron a los hombres
Para disfrutar el día.
Ríe, mi amor, ríe fuerte
Dame tus ojos felices
Aunque sólo lo imagine
Y aunque yo no pueda verte.
Aleja de ti el dolor
Aleja de mi la pena
Ponle barreras de risa
Y de tu vos tan serena.
Ríe, mi amor, ríe fuerte
Muestra tu alma de niño
Y que no te importe el mundo
Que piensa que eso no es bueno.
Si es para mi tu risa
Vuelve la vida a mi cuerpo
Y aunque yo te tenga lejos
Y aunque sienta que te pierdo
Recobro la paz querida
Y me hago dueña del tiempo.


Compañera.

Quiero ser tu compañera
Para la dura jornada
La que aleje tus tristezas
La que no te pide nada.
Quiero curar tus heridas
Quiero reparar tu alma.
Estar contigo si ríes
Llorar contigo tu llanto.
Quiero ser tu compañera
Esa del vino y la hiel
La que comparte tus sueños
La que aleja tu dolor
La alegría de tus triunfos
Y en las derrotas, tu fé.
Quiero ser tu compañera
Y andar tu mismo camino
Y obtener de recompensa
Poder morirme contigo.




Rosario de Argentina.